Si te preguntas ¿cómo hacer SEO?, has llegado al lugar correcto. Te ofrecemos una serie de 4 artículos donde vamos a analizar cada uno de los 4 grupos de factores que influyen en el SEO:
Contenido
Aspectos técnicos
Autoridad
Experiencia de usuario
En esta primera parte vamos a ver cómo hacer SEO mediante la optimización de contenido.
Palabras clave
¿Qué son las palabras clave?
Las palabras clave (o keywords/keyphrases/search queries en inglés) son las palabras y frases que las personas escriben en los motores de búsqueda para obtener información sobre algún tema en concreto. Las palabras clave son la forma en la que los usuarios buscan respuestas en línea.
Dicho esto, es fácil de entender por qué las palabras clave son factor esencial para que los usuarios encuentren algo en la red de forma orgánica. Si tu sitio web, respectivamente tu contenido, no tiene las palabras clave que busca la gente, la gente no encontrará ni llegará a tu sitio web.
Por otro lado, si identificas correctamente la información que quieren obtener tus clientes potenciales, y más concretamente – las palabras clave con las que buscan esta información, tendrás resuelta una parte importante de la optimización web.
¿Dónde encuentro palabras clave?
Hay muchas formas de definir las palabras clave adecuadas para tu contenido. Puedes usar varias herramientas como Answer the public, Semrush, Ubersuggest. También hay formas completamente gratuitas de obtener palabras clave como por ejemplo Google Trends, así como funciones básicas de Google Search como Autocomplete, Los usuarios buscan también y Búsquedas relacionadas de Google. Te dejamos nuestro vídeo sobre cómo usar Google Search para obtener palabras clave.
Puedes seguir leyendo más sobre las palabras clave y su uso aquí.
Una vez definidas las palabras clave, hay que construir el contenido alrededor de ellas. Eso sí, no te olvides que en primer lugar hay que escribir contenido para personas, no para máquinas (en este caso Google). Evita el keyword stuffing – uso excesivo de palabras clave con tal de que el contenido aparezca en los primeros resultados de Google. No solo que esto agobia los usuarios al leer, sino que en realidad puede influir de forma negativa el ranking en Google, ya que los rastreadores de Google lo detectan.
Como regla general, las palabras clave deberían estar en los títulos de páginas, en las URLs y meta descripciones y en los primeros párrafos del texto.
Intención de búsqueda
¿Qué es la intención de búsqueda?
Junto con las palabras clave, tenemos otro factor importante a la hora de buscar cosas en los motores de búsqueda. Se trata de la intención de búsqueda (o intención del usuario) – término utilizado para describir el propósito de una búsqueda en línea. Es la razón por la que alguien realiza una búsqueda específica.
La intención ayuda a especificar aún más una búsqueda y puede ayudar a concretar las palabras clave.
Google continuamente actualiza su algoritmo para poder determinar la intención de búsqueda de los usuarios y mostrarles resultados de páginas que mejor se ajusten tanto a las palabras clave, como a la intención. Eso requiere la creación de contenido que tiene en cuenta no solo las palabras clave adecuadas, sino también la intención de búsqueda.
Hay varios tipos de intención de búsqueda, pero los principales son:
Informacional: Búsqueda de información y deseo de saber más sobre un tema determinado. Muchas veces incluye palabras y frases como qué es…, cómo, mejor manera de, de qué sirve.
Navegacional: Deseo de visitar sitio web específico.
Comercial: Supone intención de compra, pero necesita más tiempo y convicción. Puede incluir frases de comparación (que …. es mejor, que …. me conviene, … vs. …, mejor…)
Transaccional: Propósito de comprar en el momento. Es probable que incluye palabras como comprar, descuento.
Como podemos ver, estos 4 tipos de intención representan un embudo con 4 fases de conversión. Conviene adaptar el contenido de una web a la fase de conversión correspondiente. Si tu página web vende productos por ejemplo, es recomendable usar más frases de intención comerciales y transaccionales. Si quieres convertir usuarios que se encuentran en la fase informacional, conviene crear contenido informativo como publicaciones que respondan a preguntas específicas.
¿Cómo identifico la intención de búsqueda?
Y si te preguntas cómo se puede conocer la intención de búsqueda de tus usuarios, no hace falta mirar más allá que los mismos motores de búsqueda. Puedes abrir una ventana incógnito en Google, escribir la palabra clave, por la cual quieres que se indexe tu contenido, y analizar los resultados que te salen. Son una buena indicación de la intención de búsqueda habitual de los usuarios, relacionada a la palabra clave que escribiste.
Metadatos
Los metadatos son elementos HTML que contienen información sobre la misma página web que los contiene. Es decir, son datos sobre otros datos.
Los motores de búsqueda usan los metadatos para definir el contenido y la temática de una página web. Esta función les hace especialmente importantes para la optimización web.
Unos meta datos acertados incluyen:
- Meta título que contiene la palabra clave objetivo de la página
- Meta descripción que explica el contenido de la página y contiene la palabra clave
Las recomendaciones del mismo Google sobre metadatos incluyen:
- Crear descripciones únicas para cada página de tu sitio
- Incluir información relevante sobre el contenido en la meta descripción
- Utilizar descripciones de calidad
Te dejamos algunos de los ejemplos de Google y su sugerencias para mejorar las meta descripciones:
¿Cómo definir los metadatos?
Si tu sitio web está hecho con WordPress, el plugin de Yoast es perfecto para crear meta descripciones adecuadas y para ajustar otros detalles que influyen al SEO.
Formato
La manera en la que formateas tu contenido también es importante para el SEO y los motores de búsqueda. Aquí destaca espacialmente el uso de H1.
H1 es un elemento HTML que se utiliza para identificar la cabecera más importante en una página web.
Los usos típicos de H1 incluyen el título de una página o de un post, el nombre de un producto o servicio. Aparte del H1, tenemos otras cabeceras (H2, H3, H4…) que, una vez definidas en el orden correcto, ayudan a los rastreadores a entender mejor el contenido de la página web.
Es recomendable usar H1 solo una vez por página y con esto definir el elemento central de la misma (el título, por ejemplo). Luego con H2, H3…, podemos seguir definiendo la jerarquía del contenido para que tanto los rastreadores, como los usuarios, lo lean y entiendan más fácilmente.
Cabe mencionar que elementos como listas, bullets, negrita también pueden ayudar a la optimización. Ya que al fin y al cabo, los rastreadores ven una página web como si fueron usuarios. Por lo tanto al formatear un texto les guiamos y dirigimos su atención a los puntos más importantes.
URLs
Las URLs son las direcciones únicas de las páginas web que ayudan a las personas a localizarlas.
Como norma básica, una URL debería contener el título de la página y la palabra clave, que en muchos casos coinciden. Es mejor tener URLs cortas y concisas, evitando números y símbolos poco comunes. Se recomienda que las palabras dentro de una URL estén separadas con guión, como por ejemplo: https://allucinant.com/es/blog/marketing-digital/what-are-keywords-and-how-to-choose-the-right-ones/.
Teniendo la palabra clave dentro de la URL le proporciona una pista extra sobre la naturaleza de tu contenido. Y como hemos visto, cuanto mejor Google entienda qué contiene tu sitio web, mejor lo va a indexar y posicionar en las búsquedas de los usuarios.